Va Mochilas por Playas Libres Para Todos

EL V PODER

POR RODRIGO AGUILERA MORALES

Va Mochilas
por Playas
Libres Para Todos

El coordinador de MC, Clemente Castañeda Hoeflich, afirmó que su grupo parlamentario impulsa una iniciativa que reforma el artículo 27 de la Constitución, para garantizar el libre acceso y tránsito a las playas de México.
“Es una iniciativa denominada ‘Playas Libres’, a propósito de los procesos de privatización que han sufrido los litorales mexicanos”, dijo en conferencia de prensa.
Acompañado por diputados federales y locales de MC en Jalisco, indicó que la iniciativa fue impulsada originalmente por el diputado local Ramón Guerrero y respaldada por unanimidad en el Congreso de Jalisco.
“Lo que nos plantea es garantizar el acceso libre a las playas, en el entendido de que lo que se concesiona (a los dueños de hoteles) no es el acceso a la playa sino la posibilidad de desarrollar un giro, en este caso comercial, cerca de la playa”, explicó.
Puntualizó que, sin embargo, “no se garantiza el libre acceso a la playa que es de todos los mexicanos”.
Comentó que la iniciativa se remitió a la Cámara baja, “para que reciba el tratamiento correspondiente”.
“El grupo parlamentario de MC respaldará esta iniciativa, pero esperamos que así como sucedió en Jalisco, el resto de los grupos parlamentarios también la hagan suya”, añadió.
El diputado local de MC, Ramón Guerrero, destacó que “se propone la reforma al artículo 27 de la Constitución, para incorporar en el capítulo de los Derechos Humanos el imperativo de que los bienes de dominio público de uso común sean accesibles y de disfrute para cualquier persona”.
“Como consecuencia, los órganos del Estado mexicano tendrían la potestad y el deber de fijar las restricciones a la propiedad privada que resulte necesaria para asegurar el derecho”, refirió.
Porque –señaló el legislador local– “existe una gran confusión: el artículo 27 de la Constitución dice que las playas son públicas, son para goce y disfrute (de los mexicanos), pero cuando se otorga una concesión a un particular no delimita qué es lo privado y qué es lo público”.
Reiteró que la iniciativa tiene la finalidad de “dignificar y generar el libre acceso a todos los ciudadanos, para que puedan disfrutar, gozar, vivir sus playas”.

José Pablo Ruiz
Líder del PAN Vallarta
de Tercera Generación

El panismo en Puerto Vallarta vive un relevo generacional protagonizado por los cuadros que resistieron la tentación de irse a Movimiento Ciudadano para aprovechar la moda política que amenaza con llegar, al menos hasta el 2018.
Uno de los panistas vallartenses más simbólicos es sin duda el actual líder de la Delegación albiazul en la ciudad, José Pablo Ruiz Bernal quien es el primer político en Puerto Vallarta en dirigir un partido político como representante de la tercera generación de la misma familia.
El abuelo de José Pablo Ruiz Bernal fue el fundador del PAN en Vallarta, don Guillermo Ruiz Vázquez, el padre de José Pablo Ruiz Bernal es el ex presidente del Comité Municipal del PAN Jesús Ruiz Higuera.
José Pablo se constituye así en el primer político de una dinastía de tres generaciones en dirigir un partido político en la región.
Se ha escrito que Don Guillermo Ruiz  Vázquez  fue  personaje principal en la historia  política de Jalisco.
Perteneció  a la generación notable  de muchachos dados  a la doctrina y disciplina, formados en lo que se llamó  Asociación Católica de la  Juventud Mexicana (ACJM), en la que  Guillermo desempeñó la presidencia en la importante parroquia conocida como “La  Capilla  de Jesús” en Guadalajara y  luego ascender a  la presidencia  de toda la  Arquidiócesis, relevando nada menos  que a José González Torres quien llegara  a ser  en el mundo,  Presidente de  Pax Romana  y en  México, candidato del  PAN a  la presidencia  de la República y presidente  nacional de ese partido.
El padre de Guillermo, don Adolfo Ruiz Díaz era de La Barca, Jalisco. Su  señora madre Concepción Vázquez Herrera era de Atotonilco El Alto, del mismo Estado. Guillermo nació en La Barca, municipio cercano a   Michoacán. Siendo un niño  su familia se  trasladó  a  Guadalajara.  Vivieron  en el  barrio de la  Capilla  de Jesús,  por la calle  Cruz  Verde. A   la vuelta  del entonces “Sanatorio de la Beata Margarita” fundado por María Guadalupe García Zavala, quien  hoy  es Santa, declarada por el Papa Francisco “Monja  de los Enfermos”.
Vecinos del rumbo en la ciudad tapatía eran Toño de la Peña, Alberto Orozco Romero, Susano Santos Flores, Francisco Rea González, Guillermo Cosío Vidaurri, así como los González Camarena, Luis Páez Brotchie, Gregorio González Cabral y otros grandes personajes.
Guillermo estudió primaria con los Salesianos, Secundaria y Preparatoria en el Instituto de Ciencias, de los jesuitas. La carrera de  Derecho y Ciencias Sociales en la Universidad  Autónoma de Guadalajara.
Como otros jóvenes de esos tiempos,  llegó al PAN  en 1938, después de haber sido presidente de la Asociación Católica de la  Juventud Mexicana. Se le considera  entre los fundadores  del Partido Acción Nacional  en  Jalisco. Durante  unos  años  militó en el Partido Fuerza Popular que le postuló  como candidato  a  diputado federal.  Pero en 1948  regresó al PAN  como socio  activo. En 1955  fue  secretario de estudios del Comité  Regional.
De ahí fue electo Presidente Regional de ese partido. En 1959  ya pertenecía al Consejo Nacional del PAN. Tanto  en 1964  como en  1970,  triunfó como diputado  federal por Jalisco.
Como abogado litigante,  representando a la Cámara  de Comercio  de  Guadalajara, vino  a Puerto Vallarta  a propósito  de la quiebra de un hotel.
Le  gustó tanto  que  cuando  tuvo oportunidad de  que  por fin le otorgaran  una notaría ,  condicionándosela   por motivos  políticos  a  que  no  fuera en Guadalajara,  de  inmediato la situó  en este lugar.
Acababa  de ser diputado federal.  Era conocido en Guadalajara, tanto como destacado dirigente panista, como  por ser propietario de  una selecta librería de nombre Criterio que estaba en  la calle de Pedro Moreno esquina con Parroquia,  a media cuadra del legendario Café Madoka y sobre todo por su dirección del  semanario “La Época”,  de  cuidado texto, sobrio formato y estilo doctrinario que dominaba Ruíz Vázquez a  conciencia.
Antes  había sido editorialista  y responsable  de la página editorial  del diario “El Occidental” en Guadalajara; entiendo, cuando era director Pedro Vázquez Cisneros, otro intelectual panista de esa época.
Fue  en  1988, cuando   la presidencia   de  ese partido  en Jalisco  estaba a cargo de Gabriel Jiménez Remus -abogado  que era  de los hoteles  “Camino Real”-, figura importante en la política nacional  durante el sexenio de Ernesto Zedillo donde fue el equivalente al  “Jefe” Diego en el sexenio de Carlos Salinas y luego prefirió ser embajador de  México en Madrid y en La Habana. Gabriel, otro panista jalisciense  que aún nos vive, pero  ya fuera del  PAN. Jiménez Remus y Ruiz Vázquez fueron grandes amigos y protagonizaron no pocas luchas políticas.
Con una veintena de personas que se reunían  en la  Notaría 3 de Puerto Vallarta, Ruíz Vázquez recomenzó  el PAN, aquí. Para 1989   se integró  una   planilla  compitiendo por primera vez  en  una  votaciones, contra  el  candidato del  PRI  que  era   Efrén  Calderón.
Conviene anotar  que  en 1949  don  Miguel Ibarría Silva, padre de José María Ibarría González, ya había figurado como  candidato  por  el recién aparecido Partido Acción Nacional a presidente  municipal de Puerto Vallarta.  Luego  el PAN  se  olvidó en estos rumbos.
A diferencia de  cuando la iniciación de Guillermo Ruíz  Vázquez   en  ese partido,  el PAN, en  1989,  ya no ponía el énfasis en  la  rigurosa  formación doctrinaria  que tanto incluía  de   teoría del  estado  y  los  principios filosóficos bien  repasados y entendidos. La orientación  era más práctica, privilegiando el ánimo opositor y   la búsqueda del  poder ¡ya!, sobre  la famosa “brega  de eternidad”. Desgraciadamente, también era el  culto  al dinero mediante el poder, disfrazándolo  de  decencias y honestidades inexistentes. Penas que hubo  de soportar don Guillermo.
En el panismo tapatío  de  Efraín González  Luna,  Rafael Preciado Hernández   y demás  juristas y filósofos    no  era bien visto  poner lo práctico sobre  lo ideológico. En esa escuela se formaron  panistas  como   Guillermo Ruiz  Vázquez, Hugo Gutiérrez Vega  y   Diego Fernández de Cevallos, entre  otros. Para  cuando el PAN se re forma y formaliza  en Puerto Vallarta lo ideológico  apenas  aparece,  la retórica dista  enormidades  de las galas impresionantes de aquellos teóricos de la democracia y del bien común. Ya  bastaba con hablar  de  “enamoramiento con el PAN”   y aborrecimiento al PRI,  mas  algo  de  frases  sobre  empresa  que luego  se identificara  como “neopanismo”, para  pasarla  a lucrar a nombre de ese partido. El gobierno llenó  al PAN  de  pobres ricos  de  hambrientos  pobres que  para pronto  saquearon las arcas públicas sin dejar obra, política o buen  recuerdo  en  los  traicionados  y desilusionados ciudadanos.
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