EL V PODER
POR RODRIGO AGUILERA MORALES
Nueva Señal de Ruptura
Yerena-González Pimienta
"El Boferas des Artistes" fue la sede el sábado pasado de un "desayuno de unidad" convocado por Rafael Yerena, líder de la CTM Jalisco y jerarca del PRI en Puerto Vallarta y la región desde hace al menos tres décadas.
Acudieron al convite, entre otros connotados priistas, el dirigente municipal del PRI Puerto Vallarta, Gustavo González Villaseñor, el médico y empresario Heriberto Sánchez, el líder sindical y alto funcionario estatal Fernando Flores Sosa, el ex alcalde de Puerto Vallarta Javier Bravo Carbajal, el Director del TEC Vallarta Roberto González, el ex regidor Adrián Méndez González "Archi", el ex dirigente del PRI Vallarta Jorge Luis García "Gío" y el Director de SEAPAL Vallarta César Abarca.
La nota de la mañana fue el infructuso esfuerzo para lograr la unidad entre los priistas vallartenses entorno a la figura de Iván Bravo Carbajal para que se convierta en el relevo de Gustavo González Villaseñor al frente del tricolor vallartense ahora que se avecina el cambio estatutario en la oficina de Río Grande.
Durante el encuentro gravitó la oposición del ex candidato a la alcaldía y regidor Andrés González Palomera y, entre otros, del médico Heriberto Sánchez (en su alianza con el ex síndico municipal MIguel Angel "Tito" Yerena Ruiz a que sea Iván Bravo quien llegue a la dirigencia del PRI Vallarta.
El propio González Palomera externó posteriormente que sí está dispuesto a buscar la dirigencia de su partido la cual ocupara hace 13 años cuando Gustavo González Villaseñor recuperó para el priismo la alcaldía de Vallarta tras tres trienios de gobiernos panistas.
Como ya se había consignado en este espacio, el tema que subyace en la división priista es la lejanía que empieza a notarse cada vez más entre los grandes aliados del pasado, los Rafaeles, González Pimienta (ahora reforzado por sus hijos Salvador y Rafael González Reséndiz) y el grupo del otro Rafael, Yerena Zambrano.
La tropa menciona cada vez con más frecuencia que "los Rafaeles" no están jugando juntos en la sucesión con miras al 2018 y el desencuentro en la designación del nuevo dirigente es una muestra de lo que viene. Hay que recordar que, durante la permanencia de Sergio Ramírez "El Cubo" como Representante del Gobernador Aristóteles Sandoval en Puerto Vallarta, se había alcanzado el acuerdo (salvo la opinión de Andrés González Palomera en contra) de que fuera el "Tigre" Iván Bravo el dirigente tricolor.
Pero la salida de "El Cubo" de la oficina dejó el acuerdo sin operador y las diferencias de opinión entre los priistas empezaron a resurgir y a complicar lo que parecía ya amarrado y decidido.
Los Efectos Posibles
La falta de acuerdos en el PRI Vallarta pueden tener repercusiones en el corto y mediano plazo ya que de entrada el grupo que respalda al doctor Heriberto Sánchez y al abogado "Tito" Yerena podría radicalizarse y tomar la decisión, de nuevo, de que ambos personajes abandonen las siglas priistas para buscar en otros partidos las oportunidades que se les están negando en el priismo.
También podría surgir la división entre quienes quieren quedarse en el PRI, como Andrés González Palomera y el propio grupo de Iván Bravo Carbajal, que se enfrentarían, como ya sucedió en 2006 por un espacio de poder que, en caso de no lograrse la "candidatura de unidad" requeriría que hubiera una elección interna del priismo que estaría de pronóstico reservado por la polarización de posturas entre quienes ven en la dirigencia priista la antesala a la nominación en 2018.
Fue, repito, en 2006, hace 10 años, cuando el PRI se enfrentó en una guerra fratricida que derivó en la salida de Heriberto Sánchez luego de que en la contienda tricolor resultara ganador el a la postre alcalde Javier Bravo Carbajal.
Por lo pronto, en el PRI Vallarta no hay humo, blanco al menos, as antorchas están ardiendo y el tricolor podría resultar totalmente quemado en los próximos meses desaprovechando la oportunidad de contender con posibilidades de ganar en los comicios del primer domingo de junio de 2018.
El PRI Vallarta dio así varios pasos atrás en la construcción de una cada vez más imposible unidad dejando todo en la incertidumbre, lo único que es seguro es que el menudo de "Boferas" se le hizo acedo en el estómago a más de uno de los reunidos por la convocatoria de don Rafael Yerena.
Perfil Joven
y su Comida
Los Jóvenes de Movimiento Ciudadano agrupados en el membrete Perfil Joven realizaron el viernes pasado su primera comida para reunir fondos para convertirse en Asociación Civil, los ex dirigentes del semillero estuvieron acompañados de la líder de Jóvenes en Movimiento Vallarta, Melissa Madero y dieron un paso más hacia la consolidación de su estructura en una segunda fase.
Reunión Estatal
MC en Atenguillo
Hablando de Melissa Madero, todo está listo para que el municipio de Atenguillo sea sede del encuentro estatal de jóvenes de Movimiento Ciudadano a realizarse en los próximos meses. El anfitrión del evento que reunirá a las juventudes naranjas será el alcalde Chalo Villaseñor, joven él también, por cierto y con mucho futuro. El plato fuerte del encuentro de Jóvenes en Movimiento serán las palabras de Enrique Alfaro con quien ya coordinan agendas para que no les falle a sus "alfariliebers".
Hablando de Alfaro...
No todo es positivo... en Guadalajara un reportero fue cambiado de “fuente” por los directivos de su diario. Sus preguntas molestaban al presidente municipal, Enrique Alfaro Ramírez, cuyos colaboradores aseguran que ellos no pidieron la salida, que simplemente llamaron para inconformarse por lo que creían una persecución. Fue ese hecho, de alguna manera, el que marcó la bienvenida al desgaste que se vive en el gobierno.
Durante los tres años previos a su contundente triunfo en Guadalajara, Enrique Alfaro y sus colaboradores se prepararon para la elección, para el gobierno y hasta para su relación con el gobierno priista. Pero no para las críticas, la revisión a su gobierno y los cuestionamientos de los medios de comunicación.
La irritabilidad del alcalde de Guadalajara se dio en el contexto del conflicto por el retiro de los comerciantes ambulantes del centro de Guadalajara. Como parte del proyecto de recuperación turística del primer cuadro de la capital, se puso en marcha un programa contundente. Vinieron los aplausos, especialmente de los empresarios, pero también el desgaste con quienes tienen el control, en particular algunos líderes ligados a organizaciones priistas.
Pero ese proyecto tuvo otro ingrediente: el retiro de comerciantes también incluyó a quienes tenían la venta de productos en el centro como única opción para vivir y llevar el pan a su casa.
No hubo trabajo de campo de los funcionarios municipales, que se limitaron a pararse en las ventanas de Palacio municipal para apreciar el centro limpio y felicitarse a sí mismos.
Los cuestionamientos por estos casos y los señalamientos de algunos líderes, generaron un ambiente de tensión en torno al gobierno municipal.
Luego vinieron otros momentos de tensión. El regreso de los comerciantes a un Mercado Corona, entregado por el gobierno del priista Ramiro Hernández con una larga lista de defectos; las compras adjudicadas de manera directa que arrojaron sospechas sobre la Comisión de Adquisiciones, lo que requirió la intervención de Alfaro Ramírez para echarlas abajo; la reactivación del contrato para el cambio de luminarias, el arrendamiento de patrullas, entre otros temas.
Enrique Alfaro siempre ha mostrado firmeza en su vida política y, en estos casos, no fue la excepción.
En el primer semestre de su gobierno, sin duda el momento más complejo surgió cuando se dio a conocer la grabación de una conversación entre su jefe de Gabinete, Hugo Luna Vázquez, y uno de los líderes de los comerciantes del mercado Corona. Aunque es cierto que en la conversación no hay indicios de corrupción y el altisonante lenguaje del funcionario puede pasar como anécdota, se deja al descubierto la actitud soberbia de un gobierno y del principal colaborador del alcalde, en particular.
Hasta ahí todo parecía normal. Lo que sorprendió fue lo que vino después. Aunque era evidente que por el papel que juega Hugo Luna en el proyecto de Enrique Alfaro no había ni la más mínima posibilidad de que quedara fuera, los emecistas asumieron el caso con la teoría del complot para desestabilizarlos. No hubo un reconocimiento de errores y todo se redujo a una petición para que el jefe de Gabinete bajara su perfil.
Después de eso, Enrique Alfaro intentó algunos acercamientos con medios de comunicación, pero ya tuvo que hacerlo él directamente. Lo significativo de esto es que sus asesores y encargados del área de comunicación social, han sostenido que pueden caminar sin los medios tradicionales y que la información se puede llevar a los ciudadanos de manera directa, a través de redes sociales y de sus propias plataformas.
Los gobiernos emecistas apenas empiezan, pero en sus primeros seis meses, ya recibieron la bienvenida al desgaste de gobernar.
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